Consejo del día

Después de cinco años de uso de la lavadora, el aparato no hace ningún ruido anormal, pero ya no puede centrifugar la ropa. La correa del aparato ya no está sujeta al eje de rotación. Ya no está en su sitio en las dos poleas. La polea motriz no se mueve hacia arriba y hacia abajo. Las poleas no están alineadas. Intente nivelar las dos poleas para que la correa no se salga. Retire la correa entre las dos poleas y compruebe si la polea de transmisión gira libremente cuando la gira manualmente en ambas direcciones con la lavadora apagada. Compruebe si la polea tiende a atascarse o no se mueve, o si gira libremente y consigue así mover el tambor de transmisión. Para averiguar el diámetro de la correa, conecte las dos poleas con una cuerda y haga un nudo. Corte la cuerda para obtener la longitud total de la correa. El número de modelo de la correa está escrito en la pieza usada. Asegúrese de que adquiere una correa compatible con la lavadora. Hay diferentes tipos de correas y no todas son adecuadas. Deslice la correa sobre el eje de rotación y conecte las dos poleas. Apriétela. Realice una prueba programando un lavado en la lavadora para comprobar que al final del ciclo la correa sigue en su sitio en el eje de rotación.